Pasta Cremosa con Pollo y Queso – Receta Fácil y Deliciosa

Introducción: ¿Por qué necesitas esta Pasta Cremosa con Pollo y Queso en tu vida?

¿Tienes días en los que solo quieres algo fácil, rico y reconfortante sin pasar horas en la cocina? Créeme, te entiendo. Y es ahí donde entra en juego esta Pasta Cremosa con Pollo y Queso – Receta Fácil y Deliciosa, la estrella de cualquier cena improvisada o almuerzo familiar.

Esta receta nació una noche entre semana, cuando no sabía qué cocinar y tenía media hora libre antes de una reunión por Zoom. Abrí la nevera y vi crema, pollo y queso parmesano. Lo demás… ¡pura magia! Desde entonces, se ha convertido en uno de los platos favoritos en casa. Porque sí, aunque suene gourmet, esta pasta es tan sencilla que hasta en un martes estresante se siente como un abrazo en forma de comida.

Además, combina lo mejor de varios mundos: proteína, cremosidad, sabor y ese toque italiano que a todas nos hace sonreír (¿o soy solo yo cuando rallo parmesano como si no hubiera mañana?).

En este artículo te voy a mostrar:

• Cómo preparar esta delicia paso a paso sin volverte loca.
• Trucos para que la salsa te quede suavecita y con mucho sabor.
• Opciones por si te falta un ingrediente o quieres hacerlo más light.
• Y un par de historias personales, porque cocinar también es compartir.

Así que si estás buscando una receta que funcione tanto para una comida en familia como para consentirte después de un largo día… ¡te prometo que esta pasta cremosa te va a encantar!

Ingredientes esenciales para preparar tu pasta cremosa

Antes de comenzar a cocinar, vamos a revisar los protagonistas de esta receta. Son ingredientes comunes, fáciles de encontrar, pero si eliges bien… ¡te aseguro que el sabor final será de otro nivel!

Pasta: fettuccine o penne, ¿cuál elegir y por qué?

Ambas opciones son buenísimas, pero tienen sus diferencias. Los fettuccine son ideales si te encanta que la salsa se adhiera bien en cada hebra. Esa textura ancha y plana hace que cada bocado sea pura cremosidad.

Por otro lado, el penne (ese tubito tan simpático) también funciona perfecto porque atrapa la salsa en su interior. Así que si tienes niños, ¡les va a encantar morder y encontrar la sorpresa cremosa dentro!

👉 Consejo de Laura: Usa pasta de trigo duro y cocínala al dente para evitar que se deshaga al mezclarla con la salsa.

Pollo tierno y sabroso: consejos para cortarlo en cubos perfectos

Aquí usamos 2 pechugas de pollo, sin piel y sin hueso. Lo ideal es cortarlas en cubos del mismo tamaño para que se cocinen parejo. No te preocupes si no salen perfectos; esto no es MasterChef.

👩‍🍳 Tip práctico: Si el pollo está medio congelado, será más fácil cortarlo en cubos limpios. Solo asegúrate de cocinarlo completamente después.

Y si un día tienes pollo ya cocido (como de un caldo o asado), ¡también lo puedes usar! Solo agrégalo después del sofrito, y voilà.

La magia del queso parmesano y la crema de leche

Esta combinación es el alma de la receta. La crema de leche (nata para cocinar) le da esa textura aterciopelada que tanto amamos. Y el queso parmesano rallado, con su sabor intenso, redondea todo con un toque salado y profundo.

🧀 ¿Queso en bolsa o rallado en casa? Si puedes, ralla el queso tú misma. La diferencia de sabor y textura es notable. Pero si estás apurada, ¡el de bolsa también salva!

Y si te preguntas si puedes usar otro queso, sí: un buen manchego curado o grana padano también van genial.

Aromas irresistibles: ajo, cebolla, aceite y perejil

• 2 dientes de ajo: bien picaditos para que suelten todo su sabor.
• 1 cebolla pequeña: aporta dulzor y balancea el resto de ingredientes.
• 2 cucharadas de aceite de oliva: para sofreír con amor.
• Sal y pimienta: ajusta al gusto, pero recuerda que el parmesano ya es salado.
• Perejil fresco picado: para decorar y darle un toque de color y frescura.

🌿 Si no tienes perejil fresco, puedes usar un poco de albahaca o incluso cebollino picado.

Hasta aquí los ingredientes. Como ves, nada complicado, pero cada elemento suma para lograr una pasta cremosa con pollo y queso que va directo al corazón.